Llora 5 minutos, solo 5.
¿Estás fastidiado, preocupado, algo te ha molestado?, ¿Estás enfadado con alguien?, ¿Te has sentido tocado y hundido? Seguro que algunas veces necesitas quejarte, enfadarte, estar fastidiado o triste más de 5 minutos, pero…¿te es útil?, ¿te sirve para algo?, ¿te acerca a alcanzar tus sueños?, ¿a superar retos?
EL VALOR DE LAS LÁGRIMAS
Te digo más, pasados esos 5 minutos, ¿crees que puedes conseguir algo quedándote ahí más tiempo? Igual tú crees que sí y esa sea una de tus formas de gastar el tiempo .Yo decidí hace un tiempo que el mío tenía demasiado valor como para malgastarlo así y considero que cualquier persona que intente llevar un equipo, liderar a su gente, o a su familia, hacer un cambio en el mundo, creo que no le va a servir llorar mucho más allá de 5 minutos.
HISTORIAS REALES
Hace unos años decidí irme a vivir a Inglaterra para mejorar mi nivel de inglés. Inocente de mí, pensaba que después de tantos años de estudiar inglés en el colegio e instituto sería llegar y encontrar trabajo, claro que sí, por supuesto. ¡Con las ganas que tenía de trabajar y aprender no habría problema! Tenía mi Curriculum listo para lanzar con que empecé a repartirlo con esa mágica frase de: «I’m looking for a job, here is my CV» (Estoy buscando trabajo, aquí tienes mi Curriculum).
Pasaron unos días pero no había mucho éxito con que me presenté en empresas de trabajo temporal y centros tipo Servef para ver si me podían ayudar. De ese modo, llegué a un centro que estaba en Candem Town, recuerdo perfectamente la calle. Cogí turno y mientras esperaba formulé en mi cabeza la pregunta que iba a hacerles, me la repetí 20 veces hasta que me tocó el turno. Le dije al señor que me atendía que necesitaba encontrar un trabajo “YA”. Me miró con cara de no entenderme, repetí la pregunta pero me decía con su mirada que estaba fallando la comunicación. Entonces él me contestó pero ahora era yo quien no le entendía.
“I can’t understand you, can you repeat please?” El señor lo volvía a explicar, y yo otra vez “I can’t understand you, can you repeat please?”. Hasta que reté demasiado a su paciencia y en la tercera explicación me dijo levantando la voz y captando la atención de las 20 personas que allí había: “Before- you- looking- for- a- job,- you- need- to- speaking- English” (O sea: Antes- de- buscar- un- trabajo,- necesitas- hablar- inglés”.)
En ese punto el mundo se detuvo, todos permanecían callados y los 40 ojos presentes, me dirigieron la mirada. Os puedo asegurar que en aquel momento con mi nivel de inglés, con mi miedo, mi vergüenza y mi nerviosismo, mis oídos estaban completamente tapados y no puede entender ni una sola palabra.
LÁGRIMAS DE COCODRILO
Después de decirme aquello, el señor me dio un papel con una dirección. Era una escuela de inglés. Cogí temblando el pedazo de papel, salí a la calle y a unos metros de allí había una especie de iglesia con un jardín externo y un típico banco inglés de madera. Y allí me senté y lloré, lloré por la frustración que sentía de no entender el idioma, lloré por la vergüenza que había sentido al sentirme mirada por aquellas 20 personas, lloré viendo como mi idea fantástica de encontrar trabajo en solo dos días se esfumaba, lloré porque tenía un miedo terrible a sentirme sola, lejos de los míos, pero lloré 5 minutos…¡solo 5 minutos!.
LLORA, PERO SOLO 5 MINUTOS
A los 5 minutos pensé: “Perfecto, ya he llorado y, ¿ahora qué?”. Miré el pedazo de papel que conservaba en mis manos y empecé a caminar hacia la escuela de inglés. Una escuela gratuita para extranjeros (sí, gratuita…¡en Londres!) donde se formaba a profesoras ingleses y necesitaban conejillos de India: extranjeros que no hablaran ni pipa de inglés, como yo, vamos. Cogí mi plano, tracé la dirección hacia la escuela y allí me dirigí. ¿Sabéis cuánto tengo que agradecerle a aquel señor que simplemente me dijo la verdad?
EXPERIENCIAS QUE MARCAN LA DIFERENCIA
Puedo aseguraros que esta es una de esas historias que te marcan de por vida, una de esas historias potentes, más eficaces que cualquier libro, cualquier consejo. Esta historia me hizo aprender que dificultades vas a encontrar prácticamente todas las semanas, complicaciones día a día, situaciones desafiantes mes a mes, ya sea con tu equipo de trabajo, con tu jefe, con tus colaboradores o tus socios… Sea como sea, si de algo está llena la vida es de situaciones que no vas a controlar, situaciones chocantes que pueden tirar por la borda lo que has planificado y en ese punto aprendí que no es tan difícil: tan solo te sientas a llorar 5 minutos, solo 5 minutos y después te levantas y caminas hacia delante, siempre hacia delante.
Sé que puedes encontrar mil y una problemáticas de distinta índole. Un día os contaré que la técnica no siempre me ha funcionado, que ha habido veces en las que 5 horas o 5 días no han sido suficientes y que igual se han convertido en 5 semanas o 5 meses, pero también te puedo decir que han sido muchas las situaciones en las que después de un no o de encontrarte un rechazo o después de algo doloroso, me he sentado, he llorado 5 minutos y he continuado hacia delante.
RETO DE LA SEMANA:
Con una probabilidad bastante alta, a no ser que te quedes cerrado/a en casa, aislado del mundo, durante la semana vas a encontrar alguna situación que no es perfecta, algo que no te gusta, que te molesta. Pues cuando puedas, quédate solo, activa un cronómetro de cuenta atrás, 5 minutos y en ese tiempo enfádate, llora, di lo que necesites decir, 5 minutos. Y cuando acabe la cuenta atrás de 5 minutos, levántate con toda la fuerza del mundo y continua hacia adelante, siempre hacia delante.
¡Nos vemos la próxima semana!
